septiembre 27, 2009

Carrera diaria.

¿Cuanta distancia existe entre tú y yo? Todos los días me levanto con la única intención de alcanzarte. Realizo mi calentamiento que consta en bañarme, peinarme y perfumarme para ver si así te das cuenta que estoy detrás de ti y bajes tu velocidad. Entonces suena el disparo y comienza esta larga, competida y divertida carrera diaria, que ya se ha vuelto un eterno maratón. Ahí me tienes echando la gota gorda por ti, deshidratado y muerto de cansancio, pero vivo de ilusión. Me mata la curiosidad de saber que haré cuando te tenga, pues me siento como el perro que persigue eterna y escandalosamente al auto sin pensar que pasaría si lo alcanzara. A veces te veo tan cerca y quiero agarrarte y besarte, pero antes de hacerlo mis piernas no responden y tropiezo, entonces te alejas de nuevo. Después de tantos días, tantas caídas y desilusiones he comprendido que ésta , nuestra carrera, ya no es de velocidad, sino de resistencia.

1 comentario:

Robert dijo...

No tiene ud idea de cuanto me gusto este escrito, muy muy bueno felicidades!